Un cuadro de carbono de alto módulo y kevlar con acabado 3k de tan sólo 800 gramos de peso, construido totalmente a mano forman la base de una bicicleta de competición exclusiva como pocas, con un peso total de 5,9 kilos (suponemos que según montaje).
La Bartoli Altair es un todo un ejemplo de cómo se hace una moderna bici de carreras "made in Italy". No se olviden de darse una vuelta por la web del fabricante italiano: Parkpre bikes
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